Cuidados básicos para mi piel madura y grasa

Cuidados básicos para mi piel madura y grasa

A menudo cometemos el error de pensar que las pieles maduras, aunque de jóvenes hayan sido de cualquier otro tipo, siempre terminan volviéndose secas. Quizás sea porque también pensamos erróneamente que una piel grasa nunca se arruga así que si la vemos envejecida y arrugada es, consecuentemente, porque es seca. ¡Falso! Se puede sufrir el acné facial durante toda la vida soportando grasa y brillos de igual modo, aunque sí hay que decir que tanto los granos como la secreción sebácea disminuyen con la edad y en gran medida al acercarse a la menopausia.

¿Por qué sigo teniendo la piel grasa?
Porque la actividad hormonal continúa malfuncionando con lo cual se mantiene la hipersecreción grasa y los problemas de hiperqueratinización (que resultan en una piel gruesa que se renueva poco).

También porque el estado de estrés al que estamos sometidos hoy día es enorme y no dejamos tiempo al descanso y relax (efecto que también se refleja en la piel) y porque en muchísimos casos no se usan los productos de cuidado adecuados los cuales provocan que los poros se obstruyan y sigan campando a sus anchas bacterias como Propionibacterium acnes, causante del acné común. Por esto y algunas causas más, la piel grasa continúa siéndolo hasta la vejez.

¿Por dónde empiezo a cuidarme?
Fundamentales, y digo fundamentales, son la Limpieza del rostro y el tratamiento Seborregulador. El tratamiento de este tipo de pieles debe estar perfectamente dirigido a cada caso en particular, teniendo en cuenta no sólo las necesidades de la piel (físicas) sino, además, las necesidades más cosméticas; con esto último me refiero a los requisitos de confort y jugosidad de una piel madura, que por experiencia ya sabe lo que quiere sentir.

Limpiadores Hay muchos pero para una piel grasa y madura podemos destacar aquéllos que limpian sin irritar, exfolian suavemente y potencian la renovación celular; Así retiramos el exceso de sebo, de células muertas y favorecemos el crecimiento de piel sana. A esto hay que sumarle que una higiene precisa prepara la piel para absorber mejor aquellos productos que se apliquen después.
Tratamientos Seborreguladores También hay muchos pero todos deben reunir unas características básicas: necesitan de un agente regulador de la secreción grasa capaz de potenciar la renovación celular, activos exfoliantes para corregir y afinar el grosor de la piel, agentes súperhidratantes que mantengan el nivel hídrico de la piel y así mejorar cuidado antiarrugas y de líneas de expresión; y todos ellos formulados con excipientes ni grasos ni comedogénicos: texturas gel o serum que además ofrecen el máximo confort a la piel. Activos como el Ácido Glicólico y Salicílico.


Cuidados antiedad Adaptados a las necesidades de la piel grasa lo que conlleva que deben ser productos oil-free y no comedogénicos, para no aportar más grasa a la piel y que los poros transpiren; que favorezcan la renovación celular con lo que conseguimos luminosidad, aparición de piel nueva, unificar el tono del rostro, alisado de arrugas y líneas de expresión (ampollas, serum, geles, gel-crema); junto con activos que potencien la firmeza y la redensificación de la piel, con lo que la actuación antiaging es completa. Todo en texturas ligeras y fluidas. Ideales los nuevos productos formulados con Ácido Retinoico de alta tolerancia.
Fotoprotección Para luchar activamente contra los efectos nocivos del sol, con texturas geles y no comedogénicos. Hay una gran variedad de protectores solares adecuados a la piel grasa y que además introducen en su formulación activos antienvejecimiento como el Ácido Hialurónico o la vitamina E.
¿Maquillaje?No comedogénico, libre de grasas y que capte brillos y matifique el rostro durante el mayor tiempo posible.
¿Grasa es sinónimo de agua?
La grasa en exceso en la piel origina problemas de "suciedad"con episodios acnéicos, poros dilatados -entre otros- y el agua en su defecto, es la responsable de que la piel no cumpla correctamente sus funciones, perdiendo también la capacidad reafirmante circunstancia que favorece la aparición de líneas de expresión y arrugas; sin mencionar que estando deshidratada es más propensa al efecto negativo de los factores externos (fotoenvejecimiento, frío, microorganismos).

Cualquier tratamiento antiedad necesita agentes súperhidratantes que mantengan el nivel óptimo de agua y que a la vez favorezcan la retención de la misma en todas las capas de la dermis. Se hace más que necesaria esta acción sobre todo en el estrato córneo (capa más superficial de la piel) para equilibrar correctamente la estructura de la barrera protectora y evitar a la vez pérdidas de agua desde las capas más inferiores.
¿Seguiré siempre con mi piel grasa?
La piel cambia con la edad y los acontecimientos que le toca vivir. De ahí que muchas veces digamos "esta crema no me hace nada porque mi piel ya se ha acostumbrado a ella" y no es así, lo que ocurre es que la piel no está igual en verano que en invierno, ni con 30 que con 40 años, cuando se atraviesa un episodio traumático que estando de vacaciones...por ello es clave identificar en qué punto se encuentra nuestra piel en cada momento.